9, 10 y 11 octubre de 2019
Lugar: Centro Cultural de España Juan de Salazar, Asunción, Paraguay.
Primer pase: 16.00. Segundo pase: 18.00.
Construir, Habitar y Transformar. Cine y arquitectura en su sentido más amplio —como construcción de espacios físicos o simbólicos; como construcción de sentidos; como reflexión sobre el proceso de creación artística y sobre la fabricación de las propias imágenes, revelando a menudo el soporte y armazón de la propia película. Este programa propone nuevas miradas sobre el hecho de habitar y construir, y sobre las posibilidades de la cámara y el lenguaje audiovisual para transformar estos conceptos tanto desde el cine narrativo, como desde el experimental.
Comedias que representan el drama de la vida cotidiana; documentos de paisajes remotos que ponen en escena otros modos de vivir; abstracciones arquitectónicas… conviven aquí entre las áridas texturas de los formatos analógicos, y las posibilidades gráficas de la imagen digital.
Jóvenes artistas y cineastas de 17 países diferentes, presentan su trabajo por primera vez en Paraguay tras su paso por los festivales y museos de mayor prestigio.
PROGRAMA 1. CONSTRUIR
Set Out 1– Mauricio Freyre (2016) – Perú/Países Bajos, Súper 16mm 2’25 min.
Puertas – Marto Álvarez (2016) – Argentina, Súper 8, 3’25 min.
Ahendu Nde Sapukai (Oigo tu grito)– Pablo Lamar (2008) – Paraguay, HD, 11 min.
Martes de Ch’Alla – Carlos Piñeiro (2008) – Bolivia, 8mm, 11 min.
El sol poniente – Carlos Vásquez (2015) -Chile, 16mm, 4’11 min.
New Madrid –Natalia Marín (2016) – España, HD, 10 min.
Pude ver un puma – Teddy Williams (2011) – Argentina, 16mm, 18 min.
Construir una imagen, una estructura, un relato, un edificio, un paisaje sonoro, una ciudad. Destruir el espacio y el tiempo.
Set Out 1, de Mauricio Freyre, se compone de fragmentos de escenas y secuencias que nunca llegaron a formar parte de las películas. Un film como un boceto, hecho de errores y descartes, en cuyo fuera de campo se intuye el ensayo y la espera. Una reflexión sobre la naturaleza de la creación cinematográfica.
En Puertas, de Marto Álvarez, el mar bate en un malecón con un punto de fuga. La imagen va revelando una puerta o una escalinata de agua. La edición, el temblor de la cámara y las superposiciones, producen la ilusión de una arquitectura elaborada.
En una única toma, en plano fijo, se desarrolla Ahendu Nde Sapukai (Oigo tu grito), donde Pablo Lamar, con la atmósfera de un cuadro romántico, construye un drama rural y arcaico sobre el duelo. Un hombre, una choza y un paisaje rural punteados por un lamento guaraní, son los elementos mínimos de este ejercicio contemplativo sobre la esencia de la creación fílmica -imagen y sonido-, y del relato clásico -presentación, nudo y desenlace- en apenas once minutos.
En Martes de Ch’alla, Carlos Piñeiro documenta el ritual aymara de las ofrendas a la Pachamama con el fin de curar los campos o fijar una base sólida antes de levantar un nuevo edificio en la ciudad. Así, cada martes de carnaval, el suelo se challa —se humedece— con alcohol, flores, guirnaldas y otros elementos simbólicos de la tradición boliviana, en honor a la madre tierra.
El sol poniente construye un paisaje sonoro a partir de varias vistas de un pueblo marroquí unidas en el montaje por la llamada del muecín. Un mundo antiguo, con su arquitectura vernácula y sus sonidos milenarios, capturado por el cineasta chileno con la textura rugosa de la película de 16mm.
Del celuloide a la imagen digital en alta definición. New Madrid habla de 8 ciudades planificadas en Norteamérica entre finales del siglo XIX y mediados del XX, que por diversos motivos fracasaron o desaparecieron. Natalia Marín utiliza la estética de la infografía (en última instancia, la proyección de un ideal), para invertirla, para hablar de un negativo, de una cara B, de un fantasma. Una reflexión sobre el simulacro, sobre el fracaso de las utopías urbanas, sobre la maldición de la copia… pero también sobre el fracaso del Madrid original, cuando la sombra de la última crisis urbanística planea todavía sobre la capital española.
Cierra la sesión el primer trabajo de Teddy Williams, Pude ver un puma, donde el joven cineasta argentino construye un paisaje fragmentario donde una continuidad aceptada nos lleva de las azoteas de Buenos Aires, a un paraje apocalíptico después de una catástrofe natural, y de allí a un bosque tropical nocturno donde la coherencia (narrativa, discursiva), el espacio y el tiempo, terminan por disolverse definitivamente. Como los jóvenes que deambulan divagando por esa geografía creativa, el film conecta y dinamita dimensiones y pensamientos.
PROGRAMA 2. HABITAR
Vientos del este/vientos del oeste - Carlos Vásquez (2015)- Chile, 16mm, 15 min.
Siesta – Azucena Losana (2018) – Chile /Argentina, Súper 8, 3’16 min
Recordando el ayer – Alexandra Cuesta (2007) – Ecuador / USA, 16mm, 9 min
Viveros – Manuela de Laborde (2014) -México, 16mm, 6’35 min
La casa del árbol – Juan Sebastián Quebrada (2017) – Colombia /Argentina, HD, 16 min
Tatuapé Mahal Tower – Carolina Markowicz & Fernanda Salloum (2014) – Brasil, HD, 10min
Habitar una frontera, tratar de captar con la cámara un lugar que no permite ser captado, un lugar prohibido. ¿Cómo filmar la frontera? “Como el viento: no es posible verlo pero se perciben sus efectos”, dice Carlos Vásquez. Vientos del Oeste/Vientos del Este viaja hasta los límites de Atacama, espacio histórico y desarraigado, impregnando la película de la tierra del desierto y de su aire caliente.
Habitar una ciudad. Valparaíso a la hora de comer pertenece a los perros y los gatos. Siesta, de Azucena Losana, es un elogio al sopor, la calma y la indolencia.
Habitar un barrio, dotarlo de identidad. De eso nos habla la ecuatoriana Alexandra Cuesta en Recordando el ayer, retrato del neoyorkino Jackson Heights y de su latinificación a lo largo de varias generaciones. Las distintas culturas conviven en esta galería de rostros y espacios urbanos hecha de estructuras industriales y sonidos de ambiente.
En Viveros, de Manuela de Laborde, la mexicana combina imágenes nocturnas del lago de Xochimilco y del Parque México, con sonidos registrados en Santa Clarita, California. Las fotografías de archivo, que se despliegan en vertical sobre la pantalla como un microfilm, son (re)pobladas y convertidas en un nuevo espacio sonoro que revive una sociedad en extinción, aquella que antaño vivía del lago y que hoy está al borde de la desaparición.
Habitar un nuevo hogar, apropiárselo, buscar un espacio íntimo y privado. Juan Sebastián Quebrada recupera a Vero y a Mateo, los tormentosos personajes de su ópera prima, Días Extraños, que tratan de encontrar el equilibrio entre el amor y la violencia en su nuevo apartamento, La casa del árbol.
Finalmente, el boom inmobiliario de Brasil, es objeto de parodia en el film de animación Tatuapé Mahal Tower, de Carolina Markowicz y Fernanda Salloum, que cuenta el drama de un muñeco de maquetas de apartamentos que trata de reinventarse después de encontrar a su mujer en la cama con otro muñeco.
PROGRAMA 3 – TRANSFORMAR
Definición – Albert Alcoz (2013) – España, 16mm, 2 min, silente
Trópico Desvaído -Valentina Alvarado (2018) – Venezuela / España, Súper 8; 6’10 min
Visión Intertropical – Adriana Vila Guevara (2018) – Venezuela / España, 16mm, 5 min
Frazada – Eduardo Filippi (2018)- España / Argentina, 16mm; 4 min
Viaje alrededor de mi cámara. Primera parte – Bruno Delgado Ramo (2019) – España, Súper 8, 50 min
Transformar una ciudad, un territorio, un punto de vista… a través del cine. La realidad urbana alterada por el ojo de la cámara, por la luz que entra o sale por el diafragma, oscureciendo la vida de la ciudad, inundándola de blanco o ralentizándola con el obturador… Brooklyn resignificado en Definición, de Albert Alcoz.
En Trópico Desvaído, Valentina Alvarado juega con las ideas de hogar, territorio, geografía o pertenencia, y elabora un collage de conceptos que destruyen la visión idealizada de su Maracaibo natal. Las lágrimas de la nostalgia empañan los recuerdos de la patria en este trabajo que combina cine y artes plásticas.
Visión Intertropical transforma el pensamiento hegemónico occidental que entiende el trópico como el centro de todas las cosas. Partiendo de la instalación Viewing Machine, un caleidoscopio gigante que el artista danés Olafur Eliasson instaló en la selva de Belo Horizonte, Adriana Vila coloca una cámara bolex en el extremo de la pieza, recogiendo la imagen multiplicada del paisaje y del horizonte, sugiriendo una multipolaridad histórica, geográfica, política y cultural de hipnótica estética psicodélica.
En Frazada, el arquitecto y artista Eduardo Filippi parte de material de archivo de palacios españoles y arquitecturas religiosas, y lo somete a un proceso de velado con cloro y tintado a mano, en un ejercicio de justicia poética contra esos símbolos de gloria y conquista.
Finalmente, Bruno Delgado traspasa los límites de una habitación para viajar a los confines del mundo. Viaje alrededor de mi cámara. Primera parte, se inspira en el relato Voyage autour de ma chambre, escrito en 1794 por Xavier Maistre. En esta novela el autor narra su estancia durante 42 días en su habitación como una suerte de novela de viajes experimental. Bruno Delgado, arquitecto y cineasta, traslada su propuesta al cine y filma una película en Súper 8 sin salir de su habitación. El pequeño espacio revela infinitas posibilidades de composición multiplicadas por las posibilidades del montaje, proponiendo un interesante diálogo entre la ventana de la habitación y la ventana del visor; entre las cortinas y el diafragma; entre la cámara -estancia- y la cámara de cine. Viajar entre cuatro paredes.
Comisariado: Andrea Franco
Programa completo en pdf
Sinopsis
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